¡Hala Celta, Campeón! ¡A Primera División!

La afición ya empezó por la mañana con pitadas: pasó un autobús con banderas celtistas y coches pitando cantando ese himno con tanto contenido cuya letra es lolololololó, lololololololo ... El partido empezó a las 19:30, me propusieron ir a ver el partido a un bar pero, eso a mi me aburre terriblemente así que, pasé de verlo y me fui a dar vueltas por el estadio y por Traviesas que es donde se celebran las victorias del Celta. Ya camino del estadio, con media hora de partido jugado, me encontré a un conocido que me explicó que no estaban jugando bien, que estaban manteniendo para no pasar del 0 a 0 que es lo que le convenía tanto al Celta como al Córdoba. En el estadio cantaban la Rianxeira y, los bares de alrededor estaban a tope, con televisiones gigantes fuera. Botellas de cerveza, latas de coca-cola, papeles, mierda varia por todos los lados. Camino de Traviesas riadas de gente, con algún que otro susto por un capullo que tiró una cerveza a la calle que, por suerte, no le cayó a nadie en la cabeza. En la plaza había gente pero todavía no demasiada y, los bares de alrededor llenos hasta los topes. Pantallas gigantes, escenarios, música y enormes focos. Mucha gente joven, niños con los padres, viejos paseando, bubucelas ... Acaba el partido, las chavalas cantan el lolololo ese que tanto contenido tiene y todo el mundo hacía la plaza. De Gran Vía bajaban auténticas riadas. Los chavales se metían en la fuente a mojarse y los viejos se quedaban en la parte más alejada. Y la fiesta a las 23:30 que es ahora mismo sigue, todavía están los jugadores en Balaídos aunque ya camino de Traviesas. ¡Hala Celta, Campeón! ¡En Primera División!