jueves, 11 de diciembre de 2014

Adiós Ramón II parte

Hubo tema otra vez. Me puse a tiro, no sé muy bien el por qué y volví a las andadas. Pero ahora si que se acabó. Ninguno de los dos queremos una relación estable pero, por lo menos ahora ya no es ir directamente al motel. Es normal, si quisieramos algo duradero, no estaríamos juntos. Fueron dos días seguidos alucinantes, aparte de los dos anteriores pero, es mejor poner distancia por medio antes de que empiecen los malos rollos, que es lo que pasa siempre. Es preferible guardar un bonito recuerdo de un rollito de otoño que no liarse con sentimientos que te nublan la visión, celos, protestar por las manías del otro y que el otro proteste por las tuyas ... en fin, todas esas cosas bonitas que pasan cuando te lías demasiado.  El ahora se va de viaje, dice que solo, aunque con quien va lo sabe él pero, no siento celos. No me importa que se lo liguen, no me importa con quién esté ni lo que esté haciendo. Se ve que, en realidad, no lo quiero. Aunque él tampoco quiere que yo lo quiera por lo que, todos contentos. Ahora si, fin de la historia. Fue bonito mientras duró.

domingo, 30 de noviembre de 2014

Lo que faltaba y adiós Ramón

Lo último de la cueva era ya lo que faltaba: más allá no se puede ir.  Lo de burlarse de un problema físico es la gota que colma el vaso. Vi movidas, lo intuía.  A un problema médico que me dificultaba el estar al pie de cañón y con público delante, haciendo un esfuerzo para hablar, se unió el malísimo rollo que me dio cuando me enteré de a qué venía la burla. Pero, por suerte, a todo porquiño le llega su sanmartiño y, el destino no tardó mucho en darle su merecido a la autora de la humillación. Espero que el traslado que le comunicaron llegue a termino para librarme de ella que es lo único que deseo en estos momentos. Y si al final no la trasladan, me joderé y tendré que conformarme con el mal rollo que tuvo después del susto que se llevó. Por otra parte, el rollito ya me dio puerta, lo cual incluso me alegra.  Sólo quería ir al motel. Lo primero que me pregunto es ¿por qué motel si tiene casa? Ante mi negativa de ir al motel directamente, el otro día accedió a ir a picar algo y, como al final no quise tema, entre otras cosas porque era tarde ya, me dijo que no quería saber nada más de mí.  En otro momento de mi vida, sería lo ideal pero, ahora mismo no estoy en esa onda. Pena no haberlo conocido antes aunque, no sé si llegaría ni siquiera a rollito porque físicamente no es ni minimamente atractivo. Yo quiero calor, quiero que me complazcan, quiero un amigo y, entonces, si que puedo irme a un motel. Lo curioso, es que, antes de que me dejase plantada como una cebolla, y cuando tuve el problema en la cueva, tuve un sueño. Soñé con el de siempre, soñé que me abrazaba y me daba calor, mucho calor. Porque era lo que necesitaba, calor. En fin: adiós Ramón.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Rollito de temporada

Necesitaba sentirme deseada, algo que no sentía desde hacía lustros. Cuando vi el brillo de los ojos de aquel   hombre, tuve claro que no era como los demás, vi deseo en sus ojos. Quedamos un día, dos días después salimos y al tercero nos fuimos a un motel. Al siguiente volvimos a vernos a iniciativa mía, y volvimos a enrollarnos. Y hoy, cinco días después, estoy a la expectativa sin saber si va a volver a whatsappearme o no, y sin saber tampoco si quiero que me llame o prefiero que no lo haga, lo único que sé es que no quiero iniciar la cadena de whatsapps. Tengo miedo a enamorarme, a volverme loca por alguien y, por otro lado, tengo miedo a la soledad secular que arrastro.  Estoy en un ay! con esa sensación de adolescente, mariposas en el estómago creo que le llaman, aunque de forma sutil, porque sé lo que viene después si la relación cuaja en cuanto se acabe la fase en la que todo es de color de rosa y, no sé si quiero arriesgarme otra vez a sufrir lo indecible por un hombre. Si todo se queda así, que es lo más probable, sólo puedo decir que fue bonito mientras duró. I've been waiting for this moment all my life!

miércoles, 29 de octubre de 2014

Samain en la Cueva de Zumarragundi

Ahora que estamos en tiempos de Samain en mi tierra, Hallowen en otras latitudes, descubro que trabajo en la cueva de Zumarragundi.  Por un lado no me quejo, por lo menos tengo trabajo que es algo importante en estos tiempos de crisis, pero tampoco se puede dejar que aplasten tu dignidad cuatro monas, las que se suponen tus compañeras, día tras días con un numerito cada 24 horas como la ONCE . Sería como si una mujer maltratada dijese: mi marido me maltrata, sí, pero tengo marido. A la niña del exorcista ya hace un tiempo que la tengo calada. Habla a gritos y cabreada, siempre llena de razón. Me fata por ver como vomita y gira la cabeza, que a todo se llegará. Ascenso seguro en dos telediarios, a ver quién la aguanta a partir de ese momento!. Respecto a la bruja mártir, por lo menos en principio parece educada, pero se le critica porque da a entender que sólo trabaja ella.  Hay que ver de quien viene el comentario y dar un tiempo para comprobarlo. En realidad no tengo mucho contra ella, de momento. Incluso muestra una comprensión y una delicadeza que no veo en otras. Perfe la zombi, licenciada pregona en cuanto tiene ocasión,como si el resto no lo fuesemos,  se permite el lujo de reprender a las compañeras y, aún así debes de agradecerle que no diga nada más de ti, porque tiene más cosas que decirte y se las calla. Es perfecta en todo, o eso se cree y se dirige a tí con ese tono de superioridad que le caracteriza, pasando por encima de categorías y sin un respeto por la edad. Cuando te explica algo te lo dice despacio y gritando como cuando un médico le explica algo a un viejo de 80 sordo para que pueda entender bien lo que le está contando. Luego tenemos a Chuky, que se dedica a gritarte delante de clientes,  faltándote al respeto cada vez que tiene opotunidad.  En teoría es mujer. Espero que la asciendan y se largue. Como está muy bien vista, tiene muchas probabilidades, espero que haya pedido el cambio y le ruego en este momento a San Judas Tadeo, patrón de los imposibles, que la premie cuanto antes por su gran saber estar y se vaya para otra oficina con su ascenso caliente debajo del brazo, siempre y cuando mi cruel destino sea seguir en esa cueva. Y, por último tenemos a la novia de Chuky, su perrito faldero a la que defiende a muerte. Zorra donde las haya, tiene dos caras. A tí te muestra una cara amable y, en cuanto puede te ridiculiza delante de las compañeras. Ésta no te dice nada, va de buen rollito, pero zorra vieja sabe bien a quien tocar para que vengan a joderte.  Así, ella siempre queda bien. Le parecen mal los comentarios de la bruja mártir que dice las cosas claras, porque dice que ella nunca le hablaría así a una compañera, lo cual es normal que lo diga porque ella va soterradamente. Ahora que sé donde estoy, me queda reirme de Janeiro y flipar imaginándome a todos los personajes que hay detrás de cada una cuando las cosas se pongan duras nuevamente, lo cual no tardará demasiado. Mañana mismo, supongo.  Y preparar el discurso para cuando al niño pera del jefe le vayan con cuentos y se dedique a echarme la bronca sin escucharme, que es algo que le pone. Manías que tiene los pijos.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Cincuenta sombras de Grey - James E.L.

Era un libro que despertaba mi curiosidad, así que, me lo traje a mi parcela de nube, que no sé donde está. El, es un supermillonario joven, guapísimo y atractivo y con tendencias sado.  Ella, no tiene ni un duro, pero no se deja impresionar por su poderío, aunque le atrae por su físico y le resulta intrigante su relación con el dolor. La relación entre ambos va evolucionando, intentando cada uno llevar al otro a su terreno. El es excesivamente absorbente y controlador y ella es más bien un espiritú libre que se enamora locamente de él. Es un enamoramiento que le produce un gran sufrimiento emocional desde el primer momento: él no permite que le toque. Para una persona enamorada, resulta muy cruel no poder pasarle la mano por el pecho a tu enomarado cuando te apetece. El, se ve atraído por ella porque es la única que se atreve a plantarle cara al gran señor Grey y, va incrementando poco a poco el dolor físico hasta llegar a dónde quiere llegar o sea, a darle una pallonera de cojones. El libro va enganchando poco a poco porque quieres descubrir quien gana, quien acaba llevando a quien a su terreno. El final, el esperado: nadie gana, ninguno de los dos va a cambiar.

El niño

La verdad es que tanto publicidad me hacía temer lo peor.  Lo que había oído sobre el argumento, tampoco es que me pareciese muy interesante: un trapichero guaperas del sur que va y viene con hachís desde Marruecos. Pero, aún así, tenía que verlo. Y allá me fui, y me encantó.  El chico de la película es más que guapo: moreno de ojos claros, buenorro y para colmo, interpreta un papel de chico tranquilo y relajado.  O sea, lo tiene todo. Y el guión tiene unos giros muy interesantes. Hay polis buenos, polis malos, traficantes malos-malísimos y traficantes de buen corazón y leales en grado superlativo. Por supuesto, tal y como nos tiene acostumbrados, la interpretación de Luis Tosar es impecable. Es una película para no perderse.

La psiquiatra - Dorn Wulf

Es el primer e-libro que leí. También es un thiller psicológico, que es un género literario que me atrae.  Gira en torno a una fuga disociativa provocada tras un trauma infantil.  No se tarda en vislumbrar las alucinaciones que sufre el personaje, aunque los golpes que recibe continuamente lleven a desconfiar también de todos los que le rodean. El desenlace es sorprendente y el final es triste pero, tampoco es que se espere un final feliz tal y como se van desarrollando los acontemientos. Entretenido, me gustó.

Libro electrónico

Esta temporada, me entretengo mucho leyendo pero, tenia varios problemas.  El primero de ellos era que para leer, tenía que tener las gafas puestas y un foco de luz.  Mis gafas son progresivas por lo que, no podía leer en cualquier postura.  El flexo, como todos los flexos me daba mucho calor, sobretodo teniendo en cuenta que estamos en verano. Y, para colmo, los libros me ocupan un montón de espacio, acaban tirados en la estantería, que ya está hasta los topes, llenos de polvo y poniéndose amarillos y, total, al final un libro que lees, normalmente no vuelves a releerlo salvo que sea un libro de consulta. Por todo ello, empecé a pensar en los libros electrónicos, pero es que los que yo recordaba tenían el fondo muy oscuro y no me resultaban fáciles de leer.  Por otra parte, lo de dar mi número de tarjeta de crédito por internet para poder bajarme libros, no era algo que me hiciera mucha gracia.  Pero, en fin, me puse a bucear en la red a ver que me contaba sobre libros electrónicos.  Y resulta que me encuentro que hay un modelo que tiene luz y que no molesta la vista porque las luces se dirigen hacia la pantalla y no hacia la vista como los ordenadores o los móviles.  Empiezo a buscar modelos y, en una comparativa veo que los más recomendados son el Kindler y el Tagus y que tienen un precio similar.  El Tagus es el de la Casa del Libro, por lo que, allí me voy.  Y, me encuentro con la sorpresa de que en la Casa del Libro, tienen tarjetas recarga por lo que, mi segundo problema de dar mi número de tarjeta de crédito por internet queda solucionado. El libro acabé comprándolo en el Worten.  Y estoy encantada. Cargo la tarjeta, me compro los libros, los dejo en la nube, los bajo de la nube, los leo, los vuelvo a subir a la nube y sólo ocupan espacio en la nube, que sabe Dios dónde estará esa nube. Y todo ello, ampliando la letra hasta quiero y sin necesidad de flexo ni de ninguna otra luz. Estoy encantada con mi nuevo juguete, resumiendo.

Perdida - Gillian Flynn

Es un gran thriller psicológico que trata sobre las relaciones de poder en la pareja. Tiene tres partes diferenciadas y cada una de ellas, le da la vuelta a la anterior. Engancha desde la primera página. Leí críticas en la que la consideraban una historia de amor, yo pienso que es una historia de odio, del odio más encarnizado que mente alguna pueda imaginar, en la que una de las partes con un claro trastorno histriónico y una personalidad excesivamente obsesiva y controladora manipula a su antojo a la otra y, al final gana la batalla.  Es una historia en la que ganan los malos, como la vida misma.  Por lo menos, se agradece que no caiga en el tópico de la mayoría de las películas en las que siempre el bueno sale victorioso, cuando ves que la vida y la realidad es todo lo contrario.  Este fin de semana, vi un anuncio en el cine en el que la anunciaban.  Dado el guión que tiene, imagino que será una gran película, para no perderse.  El libro, de lo más recomendable.

sábado, 16 de agosto de 2014

A solas con un extraño - Honey Brown

Esta temporada se me da por leer, se ve que estoy más relajada porque con los nervios a flor de piel no suelo concentrarme para pasar de la primera página de cualquier libro por muy interesante que esté.  El caso es que hace un par de días y sin saber muy bien que buscaba, dirigí mis pasos hacia una librería cercana y empecé a buscar entre los volúmenes que tenían esparcidos por las mesas, supongo que se tratan de los más actuales y los más exitosos. Me llamó la atención uno que tenía buenas referencias de la crítica y que decía que era un thriller psicológico.  La verdad es que nunca supe muy bien que género es ese al que llaman thriller pero sé que normalmente las películas con ese apellido suelen gustarme.  El caso es que decidí traérmelo. Y me encantó, me enganchó desde el primer momento que era lo que buscaba.  La historia se desarrolla en una zona rural de Australia con montañas escarpadas y tiempo inestable incluso en verano. Una mujer cuyo marido la engañaba, que la dejó en la ruina y que se acaba de separar, se escapa a las montañas con una yegua. Se quedan atrapadas en un refugio en medio de un diluvio primero y una niebla densa después,  incomunicadas con el pueblo más cercano al romperse el puente que comunica la montaña con el pueblo. Al poco de llegar al refugio, aparece un hombre que habla poco y que no parece ser digno de confianza.  Se pasan 7 días en el refugio antes de ser rescatados, los cuatro primeros duermen en lugares separados, los tres últimos deciden compartir la única cama que tienen. Y pasa lo que tiene que pasar. En cuanto son rescatados, la historia de un giro de 180 grados y nada es lo que parece ser. A mi me pareció muy buen libro, me enganchó desde el primer momento, me parece muy recomendable.

martes, 12 de agosto de 2014

A memoria da choiva - Pedro Feijoo

Como era de esperar, Pedro Feijoo volvió a deleitarnos con una nueva historia. 469 páginas que se leen de un tirón. Centrada en Galicia, siempre Galicia y girando alrededor de Rosalía de Castro, de su obra Follas Novas, de su biografía y de su legado. Novela policíaca en la que un jornalista y una filóloga recorren Galicia de Norte a Sur buscando pistas que les lleven a desenmascarar a un psicópata asesino responsable de media docena de crímenes sangrientos. La novela se desarrolla principalmente en Compostela, y desde allí nos lleva a la Casa Museo de Rosalía en Padrón, a A Coruña, a Vigo, a Arteixo, a Catoira ... siempre con ese lujo de descripciones que hace el autor y que te hace sentir como si estuvieras allí mismo. En las partes que recorría lugares que yo conozco, como la Rúa do Vilar, la Alameda, la carballeira de Santa Susana, el Campus en Santiago, o la Travesía de Vigo en Vigo me daba la impresión de transportarme a todos esos espacios sin moverme de casa.  Un gran libro, muy recomendable, eso sí, de momento sólo para gallegos porque está escrito en nuestro idioma.

martes, 22 de julio de 2014

Cada día, un numerito

Esto es como el sorteo de la Once, cada día un numerito. Hoy, otro cristo con la gente que tengo allí en el sitio al que voy todas las mañanas, no los considero compañeros. Cuando no es uno, es otro, y siempre hay algo por lo que ponerse a berrear. Son todos contra mí, ahora resulta que no soy de fiar. Es como cuando en un grupo del Gran Hermano, entra alguien nuevo. Y, lo peor de todo es que me afecta, cuando debería de resbalarme. Estoy segura de que, mi traslado ya está solicitado, sin comerlo ni beberlo soy la oveja negra. Y la verdad, espero ansiosa ese momento.  Vale, que también podría solicitarlo yo pero, de momento, me interesa seguir allí hasta que amaine el temporal y para seguir aprendiendo cosas, aunque esté con una pandilla de insoportables maleducados. No puedo contarle a nadie que me gritan porque cuando lo hago, me culpan a mí por consentirlo. Es lo mismo que cuando te violan y te culpan a ti por andar de noche por la calle. En fin, tengo que conseguir de la manera que sea, que no me afecte todo esto porque, de lo contrario, voy a acabar en el hospital con un infarto.

jueves, 17 de julio de 2014

La Teniente O'Neil

Seguimos pasándolo mal en el trabajo. Nuevas broncas con la Teniente. Como no le gustan mis métodos de control de mi trabajo, se chivó al Poli Bueno. Todo sea dicho, el Poli Malo está de vacaciones. En realidad, era lo que yo preparé y lo que esperaba que hiciera para destaparla. Siento que gané la batalla, tengo que hacerme respetar, aunque sé que perderé la guerra. En esta situación tan surrealista, la que sobro soy yo. Sólo me puede salvar la protección de mis anteriores jefes, para los que en realidad soy una desconocida, o del departamento de personal, si es que esa supuesta protección existe tal y como me repiten con rabia una y otra vez esa gentuza con la que tengo que pasarme las mañanas y que se creen los reyes del mambo. El Poli Bueno, muy en su papel, me vino de buen rollito. Y con todo el morro del mundo, me dice que estoy en desventaja porque soy "la nueva". Le dije todo lo que me dio la gana y más, por lo menos alguien me oyó, que no piensen que nací ayer. Nunca antes, me había encontrado con unas faltas de respeto tan bestiales como las que me estoy encontrando. Ahora entiendo lo que decían mis compañeros que cambiaron de servicio antes que yo, aquello de "degradación profesional", "tirar mi dignidad por los suelos", "el ambiente es fundamental" y "nunca llegaré a adaptarme". Si yo tuviese 25 años menos, habría caído en la más terrible de las depresiones. Ahora, sólo me quita el sueño un par de noches. Teniente O'Neil, que sepas que aunque sé que perderé la guerra, e incluso me quede sin trabajo, me queda la satisfacción de haber ganado la batalla.

lunes, 30 de junio de 2014

A gritar !!!

Nunca me gustó trabajar con mujeres, ahora tengo que soportar cada día a toda una pandilla de hembras histéricas insoportables.  Se pasan la jornada gritándome, cuando no me grita una, me grita otra. Es algo realmente insoportable. Al final, no te queda más remedio que ponerte a su nivel para que no te coman con patatas.  Tengo una amplia trayectoria laboral y, nunca antes me había encontrado con semejante percal.  Ni yo le gritaba tampoco a mis compañeros como norma.  Tampoco es que fuese un buen ambiente, era sencillamente un ambiente más zorro. Pues nada, es lo que hay ...  A GRITAR!

sábado, 7 de junio de 2014

Humillaciones laborales

Preocupada por mis problemas laborales, hace un par de días recibo una llamada de una amiga con la que hacía tiempo que no hablaba.  Empezamos a hablar del trabajo y la puse al día de los últimos cambios que tuve en el trabajo.  Y así, como quien no quiere la cosa, me empieza a contar que nada, que tiene cáncer y que está poniendo la quimio. Me quedé totalmente petrificada pero, supe salvar la situación ante ella. Los enormes problemas que tengo en el trabajo se quedaron pequeños ante la noticia. El caso es, que mis problemas laborales son todavía más graves de lo que yo pensaba. Entrar en un grupo ya hecho, siempre es difícil, en este caso está resultando un calvario de lo más espinoso y humillante. En un grupo de 7 personas, 2 parece que me aceptan, 3 me detestan y 2 no sé. Siempre desconfié de los grupos felices y, éste en teoría es un grupo feliz.  Lo peor de todo es que de los 3 que me detestan, uno de ellos es el jefe, que es un pijo recalcitrante e insoportable y a los otros dos los tengo uno a mi derecha y otro a mi izquierda y que, tal y como estuve observando toda la semana son los trepas que se quedan cuando se va todo el mundo para irle con cuentos al jefe pijo.  El de la derecha en teoría es una mujer, aunque se comporte como un macho de los peores. Y, para colmo de males, dependo de todos mis compañeros, porque a pesar de llevar más de dos décadas en la empresa, como estoy en otro servicio, tienen que enseñarme absolutamente todo porque no conozco las aplicaciones que tengo que usar para mi trabajo diario. Tengo que soportar  humillaciones diarias por parte de, vamos a llamarle "la macho". A pesar de ser más joven y tener menos categoría laboral que yo, me grita cuando le sale de la cona (o de la pirola, no sé si es hombre, mujer o travesti), me da ordenes como si fuese un jefe y pretende utilizarme incluso de ordenanza. Una humillación diaria. Aún por encima de todo esto, resulta que el repijo del jefe, me echa la bronca porque "la macho" le va con cuentos y me la pone de ejemplo a seguir. ¡Hay que joderse! Tú habla mal que algo siempre queda. Yo vi como echaban a otra compañera para otro servicio y, observé toda la evolución anterior, y todos los comentarios de las dos trepas que provocaron que se fuera. "La macho" es la puta jefa y el jefe no deja de ser un calzonazos a su servicio.  Que la macho era la puta jefa lo descubrí a principios de semana y, entonces decidí seguirle el rollito. Pero no sirvió de nada, tuve bronca injusta del calzonazos pijo por las quejas que le dio la susodicha individua. Tengo miedo a perder al jefe intermedio, que es el más razonable pero que, ya sabes, habla mal que algo siempre queda.  Se le llama comedura de tarro. Para colmo, tuve un par de agresiones de clientes, una de ellas muy fuerte. En la primera, la macho, me dio el toque por decirle al cliente lo que yo se que le tenía que decir. En la segunda, con un loco de atar que empezó a gritar pidiendo que me identificase y que se le dio por llamar a la policía, vino el jefe intermedio a rescatarme, lo cual todo hay que decirlo era su trabajo. Aparte del toque que no venía a cuento que me dio la macho con ese cliente, tuve dos broncas más.  La primera, la susodicha macho, y por una falta de previsión suya ya que era la que tenía que hacer el pedido de la mercancía, había dicho que no podía dar un tipo de mercancía, que diese de la otra. Vino una clienta e hice lo que la macho había dicho. Pues bien, cuando la clienta protestó porque quería de la otra, apareció la macho, le dio lo que la clienta quería, y tuve que quedar mal delante de la clienta ... Así que no tenías ... así que no tenías ... era lo que me decía la clienta. La primera vez que me dejó quedar mal delante de una clienta.  La segunda vez que pasó lo mismo, le día al cliente lo que quería, y está vez la bronca fue de la macho y de su perro faldero.  La tercera vez, se puso a vociferar delante de otra clienta, que para colmo era conocida mía, humillándome y ninguneandome.  Triste panorama, muy triste. La verdad, me había olvidado de estos detalles, los había dejado pasar pero, no pueden dejarse pasar. Hay que recordarlos y tenerlos presentes.  Esto es la guerra, la batalla es diaria y hay que defenderse.  Es tal la humillación, que incluso pensé en irme de la empresa y cambiar de trabajo de forma radical.  El repijo viene y me echa la bronca diciendo que tengo que hacer lo que la macho me manda, que por otra parte nos es mi jefa, pero ¡vamos! ¡hasta ahí podíamos llegar! También me tuvo que oir y le dije a las claras que lo que había era que tener educación.  A lo cual, me contestó que el conoce a su gente, que yo soy una donnadie impuesta de forma repentina y que lo que le estaba diciendo era una falsedad.  Ni un mínimo de respeto, a pesar de que lo conozco desde pequeño, o quizás sea esa precisamente el problema. Nunca pensé que fuese tan rematadamente tonto como está demostrando ser. Cuando le dije que me merecía un respeto, aunque sólo fuese por los años que llevaba, se echo a reir, tomándome por gilipollas y pensando que me refería al tiempo que llevaba en este nuevo servicio ¡gilipollas! ¡si todavía no llegué!, ¿en qué cabeza cabe? hablaba del tiempo que llevo en la empresa, no hay que ser muy listo para darse cuenta. Ya me habían dicho que los principios eran duros, ahora lo estoy comprobando.  ¡Ah! ¡me olvidaba! Me faltaba por comentar que el jefe superior, un gilipollas que sonríe como un parvo de colegio de subnormales, cuando me dijo cual era mi destino, me miró con ojos amenazadores, y tuvo conmigo unas duras palabras de bienvenida. Una alegría todo.  Y con la buena fama que tiene el servicio en el que estoy ahora ¿a quién se lo voy a contar? ¿quién me va a creer dentro del entorno laboral? Y tampoco se lo puedo contar a mis amigas, porque acabarían burlándose de mi. ¡Vamos! ¡Una alegría todo! Y cuando me veo en un callejón sin salida, como éste, en el que no sé que hacer, antes lloraba, ahora como ya me quedé sin lágrimas me deprimo. ¡Cuánta zorra hija de puta hay por el mundo!

jueves, 8 de mayo de 2014

Tiempos de cambio

Sólo fue necesaria una llamada telefónica para que mis funciones laborales diesen un giro de 180 grados dentro de la misma empresa.  El azar, siempre caprichoso, quiso que todo se fraguase a pocas horas del Día de la Mujer Trabajadora. Muchos nervios en los primeros momentos y también algo de pena, debo de reconocer que tampoco demasiada, por abandonar mi espacio de trabajo habitual y a los pocos compañeros que todavía seguían en el mismo lugar y que me habían acompañado durante décadas.  Semana de transición sin apenas poder conciliar el sueño y comienzo en el nuevo destino. Al principio, los compañeros, en su mayoría mujeres, parecían agradables. Me sentía una inútil porque no sabía hacer absolutamente nada, era un trabajo totalmente diferente al que había estado realizando durante toda mi vida laboral, que no es precisamente corta. Al cabo de una semana, los que llevan el negocio decidieron gastarme una novatada, como si se tratase de un colegio mayor de universitario y como si yo hubiese empezado a trabajar en la empresa antes de ayer. Si no fuera porque me jugaba mucho, le hubiese dado un par de ostias a cada uno pero, no me quedó más remedio que aguantar sus gilipolleces y callarme.  Al cabo de un mes, mis compañeras empezaron a transformarse en "las niñas del exorcista".  Lo que parecía un buen ambiente, dio un giro radical en cuanto empezaron los calores y el eterno problema con el aire acondicionado y en los pocos momentos en los que la carga de trabajo empezó a ser puntualmente más grande, empezaron a gritarme de forma continuada mostrando una increíble falta de respeto.  Ahí, ya tuve que plantarme y gritar yo también, después de pasarme un par de días sin dormir.  Ahora, parece que la cosa está tranquila, aunque no puedo decir que esta calma se mantenga en el tiempo. En cuanto al trabajo, sólo puedo decir de momento, que ya no me duelen los ojos de estar pegada al ordenador durante toda la jornada.  No sé si va a gustarme o no mi nuevo trabajo, es demasiado pronto para saberlo pero, parece que pinta un poco mejor de lo que me esperaba.

miércoles, 19 de marzo de 2014

7 de Marzo

Tiempos revueltos, crisis, ERES, restructuraciones ... 7 de Marzo, llamada del superjefe ... cambio de destino, cambio de funciones...  entrevistas, despedidas ... 17 de Marzo todo nuevo después de pasar una semana con los nervios a flor de piel.  Me siento como un pulpo en un garaje con tanto cambio, desorientada, desubicada ... muchas cosas nuevas para aprender ...  demasiada información de forma repentina ...

domingo, 19 de enero de 2014

Querido diario:

Hoy, como todos los días, me desperté pensando en él.  Todos los días de mi vida me despierto pensando en él.  Sigo enamorada del hombre que fue, o quizás del que yo imaginaba que era.  Unos días lo odio, otros lo amo locamente. Y siempre, me invade una enorme tristeza.  Es mi castigo, mi destino, mi dolor y siempre será así.  Me gustaría que existiese una máquina del tiempo para poder volver al pasado y borrar los días malos.  Y detener el tiempo en aquellos momentos felices.  Pero eso es imposible, estoy condenada a vivir con mi dolor, con mi angustia y con mi soledad. Nada me hace feliz, nada me hace ilusión.  Sólo soy una vieja solitaria. Mi vida transcurre entre ir a trabajar, en un trabajo estúpido e inestable y gastar mi tiempo de ocio. Y no hay más. Soy una gastadora de tiempo, la mayoría de las veces sólo espero a que las horas pasen de la mejor manera posible.  Esta mañana de domingo, tuve que ir a la playa con el único fin de gastar horas.  Y, por la tarde, tuve que seguir el ritual del cine de domingo, con mis gominolas, mis conguitos y mi granizada. Una película larga, 140 minutos, la de Mandela. La película está bien, estuvo entretenida. Y, al volver a casa, me encontré nuevamente con mi soledad.  Yo sé que hay vidas peores pero, cuando la desilusión y la desesperanza se apoderan de una, es difícil seguir para adelante.  La soledad es muy dura aunque, nunca lo reconoceré ante nadie, todo lo contrario.

domingo, 5 de enero de 2014

Carta a los Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

        La verdad, no creo mucho en vosotros.  Cuando tenía solamente seis años, empecé a preguntar como podía ser que los Reyes estuviesen en todas partes a la vez.  Los veía en mi vieja televisión en blanco y negro y no me encajaba que estuviesen en Málaga, en Madrid y en Palma de Mallorca al mismo tiempo.  Y sigo sin creer mucho en vosotros por lo que, no sé porque os escribo esta carta.  Quizás surja de la desesperación, del desánimo, de ... no sé.  Sólo tengo un deseo, y no se trata de nada material. Tengo serios problemas para encontrar alegría en mi vida.  Estamos en Navidades, acabándose ya y, como todas las Navidades desde hace treinta años, mi madre no para de llorar porque tiene tres nietos que no la vienen a ver nunca, ni siquiera en estas fechas.  Eso si, el padre viene corriendo cuando necesita pasta para chuparle lo que puede de la mísera pensión que tiene. Tengo amigos, si pero no disfruto cuando estoy con ellos, lo único que deseo cuando estoy con mis amigos es que llegue la hora de largarme. Tampoco disfruto con ninguna actividad, no obtengo placer de casi nada, excepto cuando por casualidad entro en el cine y me encuentro con una buena película, o con el breve instante en el que en la radio ponen una canción que me gusta, o cuando una comida está apetitosa. Tengo una vida triste, muy triste y no tengo ninguna esperanza de que las cosas mejoren, ni tengo tampoco ninguna ilusión. Por eso recurro a vosotros, en los que en realidad no creo, pero que dicen que sois mágicos con una única petición: ¿Podrías devolverme la ilusión que me ROBARON hace tanto y tanto tiempo?

sábado, 4 de enero de 2014

El médico

Soy una gastadora de tiempo, la mayor parte de mi tiempo de ocio me lo paso simplemente gastándolo y, puedo asegurar que es algo más difícil de lo que pueda parecer.  Son esos momentos de soledad y aburrimiento en los que no sabes que hacer. El cine es algo muy apañado cuando necesitas gastar tiempo. Con un paseo puedes llegar a gastar hora y media como mucho pero, una película entre que vas y que vienes y ves la película puedes llegar a darle matarile a tres o cuatro horas.  Hoy, salí de casa como otros días dispuesta a gastar tiempo y, casi sin pensarlo dirigí mis pasos a los multicines, sin saber tan siquiera que películas estaban poniendo, ni cual me apetecía ver. Por un momento dudé entre la última de los Hermanos Cohen, de la que leí algo de que está basada en la vida de Bob Dylan y El médico que está basada en un best-seller. En el último momento me decidí por El médico.  Seguí el ritual habitual para los días de cine, es decir, sacar entrada, comprar gominolas y conguitos, ir al vater, comprar un granizado de mango, salir a fumar un pitillo, entrar en el cine, volver al vater y acomodarme en el asiento.  Las gominolas y el chocolate son importantes para calmar la ansiedad que me produce ir sola al cine. Cuando me senté en la butaca pude ver que la mayoría de los espectadores eran parejas de gente mayor.  El cine se fue llenando y empezó la película. La verdad que fue una gran elección. Es una película larga, dura 140 minutos que se me pasaron volando. Me gustó mucho el guión, los paisajes son espectaculares, el protagonista principal no puede ser más guapo ... Está ambientada en la Edad Media y discurre entre Inglaterra y Persia. Las imágenes de las montañas de Inglaterra y de los acantilados de Dover no pueden ser más impactantes, al igual que las del desierto, y que las del cielo en la noche del desierto. Es una película de lo más recomendable.